19 mar 2013

De los recuerdos al "mejor no hubiera pasado"...

Cuando uno termina una relación la mente generalmente está al mil. Tenemos la desgraciada cualidad de recordar una y otra vez todos los momentos felices, los pasamos en la mente cual película con permanencia voluntaria y no conforme con ello nos bombardeamos con preguntas tales como ¿En qué momento la perdí? ¿En qué momento ya no tuve su atención? ¿Quién llena ahora sus tiempos tan maravillosamente como para que no le interese buscarme? y la clásica cancionera ¿Es ella más que yo? (en caso de que se les haya ido el amor a los brazos de otra tierna muchachita o que lo sospechen pues).
Y no, tan jodido todo que en lugar de pensar en los momentos en que se peleaban y casi se agarraban a golpes uno piensa en los tiernos y necesitados mensajes llenos de amor que iluminaban cada mañana, llenaban nuestras tardes o nos hacían dormir como angelitos por las noches. En inútil a veces intentar dejar de pensar en ello y es además espantoso, a menos que hayan ya perfeccionado alguna técnica de bloqueo de pensamientos la cosa se vuelve insoportable y además crea una ansiedad terrible.
Entonces ¿qué pasa?, uno empieza a pensar cosas tales como "Mejor ni la hubiera conocido", "mejor ni me hubiera enamorado/ilusionado/clavado/enculado/viciado/ymuchosadomás", porque seamos honestos, nadie muere de amor (o sea pues, el amor tal cual no mata, el que muchas personas maten o se maten por el dolor que causa el desamor ya es otra cosa), pero esa sensación, ese dolor, esas lágrimas, ese desgane, esa incapacidad para levantarse de la cama, ese constante malhumor, ese escuchar en donde sea las canciones que te recuerdan a la persona (que además cuando nos dejan TODAS las canciones se vuelven nuestro OST y nos recuerdan a la persona a la que hemos perdido)...
Y ... ¿después qué?, aquí viene la respuesta más odiada por todos en esos momentos, después NADA, al final no pasa nada y con el paso del tiempo uno comienza a curarse. Es cierto, uno quisiera que fuera instantáneo, que dejara de doler en el momento (porque además es inconcebible, ¿cómo la persona a la que amo tanto y que tan feliz me hacía ahora me provoca tanto dolor? Parece burla de la vida), pero no es así, no es inmediato y a veces es cierto, tarda bastantito tiempo (en mi juventú le lloré a una exnovia dos años... de verdad.. DOS AÑOS).
Pero lo cierto es que uno no se puede arrancar el dolor y muchos menos los recuerdos, así como es verdad que muchos de esos recuerdos fueron realmente buenos y que en su momento nos hicieron tremendamente felices.
Duré en una relación casi 5 años, al terminar me deshacía y tardé meses en recuperarme. Ahora puedo volver la vista atrás, puedo inclusive ver a mi ex y platicar con ella, la veo con todo el cariño del mundo y simplemente pienso:  Qué buenas historias tuvimos, qué fortuna haberlas vivido, qué maravillosa su existencia y qué bueno que no las olvidé.

En espera de que su (nuestro) tiempo pase rápido si es que lo necesitan o lento si es que lo están gozando les mando un abrazo.

Punto y aparte.

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