me siento como una niña de primaria que tiene su fiesta de cumpleaños a donde ninguno de sus compañeritos va a ir... y entonces desesperadamente empieza a hacer llamadas o a buscar a todo mundo para convencerlos de que vayan. Así me siento, pasé la mañana buscando a la gente más cercana a mi para preguntarles si me querían acompañar- Nadie quiso. Me lo imaginé, la verdad es que era obvio. Dicen que la esperanza muere al último, yo creo que más bien ya todo mundo de ha acostumbrado a ni siquiera tener esperanza, ni sueños.
Voy sola, me iré sola, pero voy.
Punto y aparte
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2 comentarios:
Y a dónde chingaus fuistessss????
a la marchas... pero he decidido que no voy a bloggear al respecto...useless...
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